La proteómica es el estudio de las proteínas, de cómo es su estructura, la función que tienen y sus posibles modificaciones. Y es que las proteínas son esenciales para los seres humanos, puesto que le ayudan al cuerpo a reparar las células que están dañadas y a producir otras que son nuevas. Para ello, es vital consumirlas a través de la dieta.
En el campo de la proteómica se identifican y cuantifican las proteínas con el fin de aislarlas y comprender cómo funcionan. Asimismo, también en laboratorio se investigan aquellas modificaciones que aparecen en algunas proteínas y que son, a veces, fundamentales. Algunas de estas modificaciones son la fosforilación (cuando se añade un fosfato a otra molécula) o la glicación (unión de proteínas con proteínas, lípidos o ácidos nucleicos).
Algunas de las técnicas empleadas en proteómica son la electroforesis en gel bidimensional o los microarrays de proteínas, entre otras. El objetivo de estas técnicas es permitir la separación, identificación y estudio altamente detallado de las proteínas que se están investigando con el objetivo de identificar biomarcadores de enfermedades o desarrollar nuevos fármacos útiles para el abordaje de determinadas enfermedades.