La progesterona es una hormona indispensable en el ciclo menstrual de las mujeres. La producen los ovarios y prepara el endometrio, que es la capa que cubre el útero, para que un óvulo fecundado pueda implantarse con éxito. Es por esto por lo que, tras la ovulación, los niveles de progesterona aumenta. Si no se produce la implantación del óvulo, porque este no se ha fecundado, los niveles de esta hormona caen en picado.
La progesterona también es útil durante el embarazo de la mujer, ya que crea el entorno adecuado para que el embrión se desarrolle sin problemas y, además, también ayuda al desarrollo de las glándulas mamarias para la lactancia tras el parto. Por lo tanto, la progesterona es una hormona muy importante para las mujeres en diferentes etapas de su vida. Aunque, hay ocasiones en las que sus niveles pueden estar altos o bajos.
Cuando los niveles de progesterona son demasiado elevados o hay un embarazo o un cáncer de ovario, incluso algún quiste en los ovarios. Por eso, hay que hacer las pruebas oportunas para saber qué es lo que está sucediendo y poder actuar con rapidez.
En el caso de que los niveles de progesterona sean bajos, hay que tener cuidado si se ha producido un embarazo porque hay riesgo de aborto. Asimismo, quizás haya un embarazo ectópico o una muerte fetal intrauterina. Habrá que identificar la causa.