La metagenómica se encarga de estudiar el material genético de los microorganismos que pueden residir tanto en la piel de los seres humanos, como en el suelo o al obtener una muestra de agua. El objetivo es entender la diversidad de los microorganismos, cuáles son sus funciones y la manera en la que interactúan con el entorno.
El proceso se lleva a cabo de la siguiente manera:
El impacto que ha tenido la metagenómica es importante, pero también desconocido. Y es que ha permitido descubrir nuevas especies de microorganismos de los que no se sabía nada, así como entendido cómo funciona la complejidad de los distintos microorganismos que habitan en los seres humanos, el suelo o el agua.
En el campo de la medicina y la salud, la metagenómica permite comprender cómo el microbioma juega un papel crucial en la salud de las personas. De hecho, los microorganismos que habitan en el intestino son fundamentales para una buena digestión y, también, resistencia frente a las enfermedades.