El virus de la inmunodeficiencia humana, también conocido como VIH, ataca el sistema inmunitario del cuerpo, dejándolo desprotegido frente a infecciones y enfermedades. No obstante, algunas personas solamente son portadoras del virus y no sufren sus consecuencias, mientras que otras sí pueden haber desarrollado la enfermedad. En este último caso es cuando se puede hablar de SIDA.
Cuando una persona porta el virus se la denomina seropositiva. Aunque no desarrolle el SIDA y, por tanto, su sistema inmunitario funcione bien, sí puede transmitir el VIH. Por eso, es crucial saber cuándo se es portador para tomar las medidas necesarias que puedan proteger a los demás de contraer el VIH. Sin embargo, esto no es nada fácil, ya que esta es una enfermedad que no manifiesta síntomas y, si lo hace, estos pueden confundirse.
La manera en la que se contagia el VIH es a través de los fluidos corporales de otras personas: la sangre, el semen, las secreciones vaginales o la leche materna. También si se comparten agujas o jeringas, incluso otros elementos como cuchillas de afeitar, esto puede ser una vía de contagio. En algunos casos, aunque no es lo más habitual, puede transmitirse el VIH por una transfusión de sangre.
Si bien la mayoría de las personas no presentan síntomas con el VIH, sí es verdad que algunas pueden presentar llagas en la boca, erupciones en la piel, diarreas, cansancio, sudores nocturnos, fiebre o dolor de cabeza. Sin embargo, esto puede confundirse con gripes, alergias o gastroenteritis, entre otras enfermedades.
No obstante, el mayor de los problemas es que estas personas deben protegerse de contraer la gripe, neumonía o la Covid-19, por ejemplo, ya que, al no ser su sistema inmunitario capaz de actuar con la misma eficacia que una persona sana, son más vulnerables a complicaciones. Es esta una de las razones por las que algunas personas diagnosticadas pueden fallecer.
Para diagnosticar el VIH debe hacerse una prueba de sangre y, una vez confirmado, el tratamiento suele ser con medicamentos antivirales. De esta forma, se intenta reducir la cantidad de virus en el cuerpo que dañan el sistema inmunitario para que los pacientes puedan tener una buena calidad de vida. En la actualidad, esto es posible.
Si desea conocer más sobre el proceso de la prueba para la detección del VIH u otras ETS, consulte nuestro Test de Enfermedades de Transmisión Sexual Completo.