Los biomarcadores son elementos que se pueden medir para detectar enfermedades o estudiar cómo está funcionando un tratamiento médico en un paciente. Estos elementos pueden ser moléculas, proteínas, células o enzimas que permitan una medición y evaluación objetiva en laboratorio.
En medicina, los biomarcadores son cruciales para poder medir, por ejemplo, el nivel de glucosa que hay en la sangre (para manejar problemas como la diabetes) o el colesterol. Pero, también son de utilidad en el momento de realizar ensayos clínicos para encontrar las causas genéticas de algunas enfermedades.
La precisión y la capacidad para proporcionar información detallada, han sido claves para los médicos, dado que gracias a los biomarcadores se puede conseguir un avance en el área de la salud, así como lograr una mejoría en el bienestar de aquellas personas que están padeciendo algún tipo de enfermedad.
Actualmente, los biomarcadores se aplican de diferentes formas. Tanto para ayudar a identificar una enfermedad que ya está en curso, como obtener información sobre cómo evolucionará dicha patología o de qué manera está respondiendo el paciente a un tratamiento que está recibiendo con el fin de adaptarlo y que sea lo más eficaz posible.