El síndrome de Lynch es un trastorno genético hereditario que se transmite de padres a hijos y que puede aumentar el riesgo de desarrollar cáncer colorrectal en el futuro. No obstante, las personas portadoras también pueden acabar padeciendo otros tipos de cáncer que no necesariamente afecten al colon.
Las causas del síndrome de Lynch se deben a una serie de mutaciones que se han producido durante las replicaciones del ADN y las probabilidades de que los hijos las hereden de sus padres son altas. De hecho, el porcentaje es de casi la mitad cuando uno de sus progenitores es portador de esta alteración genética.
Algunas personas diagnosticadas pueden acabar teniendo cáncer colorrectal, pero también de endometrio, ovario, estómago, intestino delgado, páncreas o riñones, entre otros. Por eso, es imprescindible que se sometan a revisiones y pruebas anuales que les ayuden a detectar de manera temprana el cáncer en el caso de que este aparezca.
Existen circunstancias en las que los pacientes con síndrome de Lynch pueden someterse no sólo a exámenes regulares, sino a cirugías preventivas. Sin embargo, en este último caso, se recomienda seguir las indicaciones del médico que lleve cada situación particular y que actuará con el objetivo de reducir el riesgo de cáncer.
Si a pesar de todo, esta patología finalmente aparece, debido a los exámenes realizados se detectará en un estadio temprano, incluso aunque todavía no manifieste síntomas. Esto aumenta las posibilidades de éxito, de reducir la gravedad de la enfermedad y de incrementar la supervivencia de la persona diagnosticada.
En algunos tipos de cáncer, como es el caso del de colon, la sintomatología suele aparecer cuando ya está muy avanzado, lo que complica el tratamiento, que es mucho más agresivo y, también, reduce las posibilidades de que el pronóstico sea favorable. Por tanto, hay que tener esto presente cuando hablamos del síndrome de Lynch.
Si presenta sintomatologías relacionadas con el cáncer colorrectal o cree que tiene predisposición a padecer del mismo, consulte nuestro test de predisposición genética al cáncer colorrectal.