A partir de los 50 años, todas las mujeres deberían someterse a una mamografía, dado que el riesgo de sufrir cáncer de mama aumenta en estas edades. Desde la Asociación Española Contra el Cáncer (AECC), explican que esta prueba se realiza cada dos años, aunque no haya síntomas. Ahora bien, todavía existen muchas dudas y preguntas sobre la mamografía, cuándo hacerla, cuál es su importancia, etc., que hoy resolveremos.
Importancia de la mamografía
La importancia de hacerse una mamografía radica en que es uno de los tumores más frecuentes en las mujeres. La Fundación Grupo Español de Investigación en Cáncer de Mama (GEICAM) comparte que hasta el 30% de los cánceres que se diagnostican en las mujeres se inician en la mama. Por lo tanto, saber qué es la mamografía, cuándo hacerla y la periodicidad a la que someterse a esta prueba es crucial para salvar vidas.
La edad recomendada para la mamografía es a partir de los 50 años, como mencionamos, no obstante, hay circunstancias en las que esto puede personalizarse. En mujeres que tienen antecedentes en su familia de cáncer de mama, esta prueba podría empezar a recomendarse a partir de los 45 años para poder detectar la enfermedad a tiempo.
El diagnóstico precoz es muy importante, dado que desde la AECC comparten que esto permite unas tasas de curación del 100%. Aunque, después, haya que realizar un seguimiento para comprobar que el cáncer no vuelva a aparecer, sin duda, el pronóstico es mucho más favorable cuando el cáncer está en su primera etapa.
¿En qué casos es recomendable hacer una mamografía?
Ahora que conoces un poco más sobre la mamografía y cuándo hacerla, es importante aclarar cuáles son aquellos casos donde esta prueba es importante:
- Cuando se tienen más de 50 años: a partir de esa edad se diagnostican más cánceres de mama y, también, la mortalidad aumenta. Según los datos que ofrece Statista, en 2023 la tasa de fallecimientos en mujeres mayores de 74 años se situaba en 120 por cada 1000 personas.
- En caso de antecedentes familiares: puesto que si una mujer de la familia, especialmente una madre o abuela, ha tenido cáncer de mama, las posibilidades de que las generaciones posteriores lo hereden son superiores. Para poder detectarlo a tiempo, si aparece, la mamografía es esencial.
Si hay algún bulto en la mama: cuando en una palpación se detecta un bulto en la mama, la piel algo más dura de lo habitual o enrojecimiento de la zona, será vital someterse a una mamografía independientemente de la edad que se tenga. De esta manera, se podrá corroborar el diagnóstico de cáncer de mama.
Dudas frecuentes antes de hacerse una mamografía
Es normal que existan dudas sobre esta prueba, como a qué edad puedo hacerme una mamografía. Aunque en nuestro país la recomendación y cribados empiezan a los 50 años (en casos concretos antes), sí es verdad que una mujer joven de 20 o 30 puede estar preocupada por esta enfermedad. No obstante, los estudios informan de que para las mujeres de menos de 35 años la mamografía no es una prueba de cribado adecuada, debido a su alto porcentaje de falsos positivos.
Asimismo, la frecuencia de los cribados es a los 2 años y no es peligroso hacerse una mamografía amamantando –siempre debe hacerse tras el vaciado previo del pecho–. De hecho, desde el Comité de Lactancia Materna de la AEP explican que la lactancia no es recomendable suspenderla por hacer una mamografía, aunque sí puede haber dificultades para interpretar los resultados. En estos casos, se puede optar por la ecografía mamaria.
Saber cuándo hacer una mamografía es crucial para someterse a este cribado que salva tantas vidas. La Sociedad Española de Senología y Patología Mamaria (SESPM) explica que 1 de cada 10 mujeres sufrirá esta enfermedad. Por lo tanto, para cuidar de la salud, hay que someterse a esta prueba a partir de los 50 años, aunque hay muchos otros tests para la salud de la mujer que se pueden hacer en nuestro centro Unilabs.